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sábado, mayo 13, 2017

5 Cristianos compiten por el Campeonato en los juegos de la NBA




1. Nené Hilario, 34 años, Houston Rockets

Antes de que el gran veterano se convirtiera en un mentor para la estrella de los Rockets, James Harden, el brasileño conocido simplemente como Nené puso su fe en Dios para superar el cáncer.

Hace nueve años, Nené luchó por su salud cuando le tuvieron que remover un tumor testicular en 2008. No mucho tiempo después, su esposa fue sometida a una cirugía cerebral para remover un tumor benigno de su glándula pituitaria.

El jugador de baloncesto, que se describe a sí mismo como “un hombre de Dios” en Twitter, dijo que cree que Dios lo acompañó a través de éstas difíciles circunstancias para ayudar a otros.

“Entendí que Dios, de cierta forma me marcó, para entender a otros, aquel día que fui diagnosticado con cáncer. Él me dijo, ‘Tendrás que pasar por esto para ayudar a muchas personas,” Nené había compartido previamente en una entrevista, “Soy nada sin Dios, todo lo que he superado, lo he hecho porque Él estuvo conmigo. Si no hubiese sido así, yo hubiera caído en la primer prueba.”


2. Bradley Beal, 23 años, Washington Wizards

Las redes sociales de Bradley Beal expresan mucho acerca de su fe. La portada en su cuenta de Twitter comienza con la leyenda “A Dios sea la Gloria”, mientras que la descripción de su página en Instagram reza “bendecido”.

El mes pasado, Beal tuiteó mensajes cargados de fe a cerca de 250,000 seguidores en Twitter, como “¡entregale todo a Dios!” y “bendecidos de poder disfrutar un nuevo día”.

De adolescente, Beal se tatuó símbolos de su fe que él mismo diseñó. Algunos incluyen un par de manos juntas en señal de oración con el texto Filipenses 4:13, “Puedo hacer todas las cosas a través de Él que me fortalece.”

Beal le reconoce todo el crédito a Dios y a su familia por haber llegado a la NBA.

“Sé que hay muchos que no tienen familia, o a alguno de sus padres,” dijo Beal. “Pero en mi caso, si ellos no hubieran estado allí alentándome y sin Dios, yo no estaría aquí.”


3. LaMarcus Aldridge, 31 años, San Antonio Spurs

LaMarcus Aldridge no creció con una cuchara de plata en su boca. De hecho, el recuerda haber ido a la cama con hambre de joven.

Aunque al entrar en la NBA en 2006, pudo mejorar su condición financiera, Aldridge también superó circunstancias como problemas cardíacos en su primer año en la liga, los cuales por poco lo inhabilitan permanentemente, además de acompañar a su mamá en la batalla contra el cáncer.

Aldridge cree que Dios le dió la plataforma para traer Gloria a Su Nombre y ponerlo en lo más alto.

“Vengo de la pobreza, de un hogar donde no teníamos para comer, a donde estoy ahora,” contó Aldrigde. “Sé que fue Dios dándome la guía. Soy uno de sus hijos, y Él me permite darle la Gloria a través de éste deporte.”

“Él te da fuerzas, calma, convicción, y se lleva en cambio toda preocupación,” expresó Aldrigde. “Si crees en Dios, no deberías preocuparte. Somos sus hijos y Él estará ahí para nosotros siempre.”


4. Steph Curry, 28 años, Golden State Warriors

La familia de Steph Curry lo ayudó a alimentar su fe desde la juventud. Curry recuerda sus comienzos de su relación con Dios.

“Mis padres nos llevaban a la iglesia cada domingo y cada miércoles. En ese punto era más una tradición; yo no tenía una relación personal con el Señor, hasta que un día me acerqué al altar después de un llamado y tomé la decisión por mi mismo,” contó Curry. “El Pastor juvenil remarcó que esto era personal, no podíamos recostarnos en nuestros padres. Era nuestra decisión, y yo la tomé.”

La fe de Curry siempre ha estado al frente en su carrera, lo que llevó a dar una conferencia en la Universidad Cristiana Liberty en Lynchburg, Virginia, a principios de año. Allí, el habló a los estudiantes acerca de dar la Gloria a Dios usando sus carreras profesionales.

“El Señor me ha bendecido para hacer algo especial. Pero no se trata de mí,” dijo el jugador. “Hay algo que deseo que en mi carrera y en mi vida sea un reflejo -Su Amor y Su Gracia y Misericordia. No importa si se ganan partidos, o se pierden; si se anotan puntos o no -todo sea para la Gloria de Dios.”


5. Kyle Korver, 36 años, Cleveland Cavaliers

La fe cristiana de Kyle Korver ha estado muy arraigada desde su niñez con un número de pastores en la familia. Korver considera una bendición el haber crecido con estas influencias del cielo.

“Mi papá, mi abuelo y un par de tíos fueron pastores, y yo crecí con mucha influencia piadosa que me fue formando,” contó el atleta. “Qué bendición fue para mí.”

Mientras Korver reconoce no saberlo todo después de 14 años en la NBA, él aún quiere honrar a Dios desde su lugar.

“No sé que traerá para mi el mañana, y no sé porqué Él me ha dado estas oportunidades, pero estoy muy agradecido,” dijo Korver. “Voy a dar lo mejor de mí para honrarlo pues todo proviene de Él.”

Aunque se ha vuelto rico, Korver no ve a la NBA como su “premio de lotería”. Al contrario, él remarca que la verdadera riqueza proviene de su relación con Dios.

“Creo que Dios está buscando nuestros corazones, y si nosotros le buscamos con sinceridad, Él nos sustenta,” contó Korver. “Cuando esto sucede, las raíces de nuestra fe se profundizan. Eso es lo que enriquece nuestras vidas.”
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