En un supermercado de Brasil, la joven cristiana Izabelle Ribeiro protagonizó un emotivo momento al cantar la canción “Yeshúa”. Su interpretación conmovió a todos los presentes, quienes se detuvieron a escucharla y comenzaron a unirse espontáneamente en adoración.
El ambiente se transformó en un verdadero altar, mostrando el poder que tiene la adoración cuando nace del corazón.
Este hermoso suceso es un recordatorio de cómo Dios puede manifestarse en cualquier lugar y a través de cualquier persona dispuesta a exaltar Su nombre.
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