Un pastor cristiano en Burkina Faso, África, ha perdido su iglesia y su hijo en un brutal ataque perpetrado por extremistas islámicos. El pastor John, quien había dedicado 15 años de su vida a servir a su comunidad, se encontraba visitando a una persona enferma de su iglesia cuando los atacantes llegaron.
Según relatos, los yihadistas iban de casa en casa, obligando a los cristianos a seguir el Islam. El pastor John intentó ayudar a su comunidad, pero se vio obligado a huir para salvar su vida. En el caos, su hijo fue asesinado, y 113 personas más perdieron la vida. La comunidad cristiana de Burkina Faso está conmocionada y dolida por la pérdida.
A pesar del dolor y la tragedia, el pastor John ha encontrado la fuerza para seguir adelante gracias al apoyo de organizaciones como Puertas Abiertas, que le han brindado atención postraumática y apoyo emocional. "Doy gloria a Dios por la ayuda", dijo el pastor John. "Es cierto que he perdido a mi pueblo, pero ahora soy lo suficientemente valiente para dejar esto atrás y continuar en la obra de Dios".
No hay comentarios
Publicar un comentario